Oscar Cardozi, mejor conocido como el Sobrecallo de Colombia, es un prolífico músico de bullerengue y champeta oriundo de Maria la Baja, Bolivar. Viene de un largo linaje de músicos de bullerengue y pretende continuar de manera empírica la herencia de sus ancestros. Tuve la oportunidad de conversar con el Sobrecallo y que él mismo me contara su impactante historia, su proyecto de vida y sus sueños.

Desde muy pequeño, Cardozi ha estado involucrado en las actividades musicales de su municipio como el Reinado del Bullerengue, con el que lleva más de veinte años colaborando. En 1996 grabó su primera canción junto al célebre compositor Pedro Pablo Peña para luego grabar en Cartagena varias canciones en dialecto palenquero con un grupo de champeta del que también participó el músico Stevenson Arnedo y el reconocido cantante Louis Towers.

Sobrecallo ha vivido de cerca el conflicto armado. Por cuenta de ello ha perdido a varios familiares a manos de grupos armados que entraron a su región, obligándolo a desplazarse a distintas partes del país como Bogotá y Cartagena. Por eso está convencido del papel fundamental de la música en la construcción de un mejor país. “La música es la mejor herramienta para sensibilizar a los colombianos, porque nosotros a todo le ponemos música, todo lo hacemos con música. Por eso es que a través de ella se pueden promover muy bien campañas para la prevención del embarazo adolescente, por ejemplo, o la violencia intrafamiliar, y muchas otras cosas que son más claras a través de la música.”

Como líder social y gestor cultural en Maria la Baja ha participado en distintos proyectos donde las manifestaciones artísticas son herramienta de cambio e innovación social. Ha trabajado, por ejemplo, en la realización de jingles de campañas políticas y cuñas publicitarias para, como él mismo dice, “sensibilizar a la gente sobre diferentes problemáticas a través de la música”.

Los jingles del Sobrecallo se dieron a conocer gracias a la campaña política de 2015 de Carlos Coronel, actual alcalde de María la Baja. Para dicha campaña, el músico hizo una canción llamada “Púyale el ojo,” que invitaba a los habitantes de la región a puyarle el ojo a aquellos pretendieran comprar su voto. Este jingle fue muy bien recibido por la gente y se convirtió en un éxito tanto para la campaña de Coronel como para el Sobrecallo.

Sobrecallo ha participado en diferentes eventos como los carnavales de Puerto Escondido, los de San Juan Nepomuceno, las fiestas de Necoclí, Antioquia, y el Festival de Tambores de San Basilio de Palenque, tocando con agrupaciones de bullerengue. Hoy, el cantante y compositor sueña con conocer el Carnaval de Barranquilla. “Dicen que allá quien lo vive es quien lo goza, yo nunca he estado y me sobran las ganas de estar. Yo conozco Barranquilla de paso, por las escalas que hago en el terminal cuando he ido a Bogotá, pero no he estado en esos carnavales; ojalá la nueva canción me lleve para allá.”

Esa nueva canción es “Deo sobao”, una pegajosa champeta que habla jocosamente del cambio en la tecnología que hace que los celulares de teclas hayan sido reemplazados por los de pantalla táctil, a los cuales su abuela llama “celular de deo´sobao´.” La canción, que nació a raíz de la divertida anécdota de la reacción de su abuela cuando le regalaron uno de estos celulares, ha tenido un fuerte impacto en su región al ser reconocida y disfrutada por los habitantes de María la Baja.

“Todo el mundo acá en mi casa estaba usando esa expresión del deo’ sobao’ y los sobrinos míos me decían ‘ay tío, ¿no le va a componer una canción al deo’ sobao?’ Me empezaron a pullar, entonces yo hice la canción y recreé en el video la historia con mi abuela que al principio no quería ese celular porque decía que era muy complicado, y después, cuando le expliqué cómo se manejaba, ya se metió a la tecnología y se amañó con su deo’ sobao’. A la gente le ha gustado mucho el video,” me cuenta entre risas.

Sobrecallo cuenta con una admirable capacidad de convertir en canción cualquier elemento o hecho de la cotidianidad. Por eso es que “Deo sobao” ha tenido este inesperado impacto. “Aprendí que ya soy profeta en mi tierra porque me he dado a conocer de María la Baja pa’ afuera. Allá se grabó el video y ya todo el mundo, los niños, los viejitos, todos, apenas me ven cantan el “Deo sobao”, y también en Cartagena donde estoy viviendo. El otro día vino una muchacha que vive en la Guajira y dijo que allá también suena “Deo sobao”, y también la están programando en todo el país desde Bogotá, a través de Radio Nacional de Colombia. Ojalá se vuelva tendencia nacional. Yo espero que sea el tema que me saque del anonimato.”

La grabación de esta canción y de su respectivo video fueron posibles gracias al proyecto Laboratorios Vivos de Innovación y Cultura, que tiene como objetivo crear programas de formación y nuevas tecnologías para incentivar los procesos de innovación social y de emprendimiento en el departamento de Bolívar, para facilitar la sostenibilidad de la cultura. Dicho proyecto le permitió también a Sobrecallo presentar su proyecto de jingles publicitarios para generar procesos de innovación social.

La música de Sobrecallo da buena cuenta de lo que somos como habitantes del Caribe: gente que combina la curiosidad y la picardía, y que encuentra en las situaciones más cotidianas de la vida un motivo para cantar. Los invitamos a ver el video de “Deo sobao” y a compartirlo para que así ayudemos al cantante a cumplir su sueño de actuar en el Carnaval de Barranquilla, seguros de que la felicidad será también para quienes lo vean.